En los últimos años hemos asistido a un paulatino y constante incremento en los recibos de IBI, debido entre otras causas al aumento del valor catastral de los inmuebles.
Determinados municipios que durante décadas habían permanecido adormecidos, en cuanto a valores catastrales se refiere, han despertado para sumir a sus contribuyentes en un proceso de alteración tras otro.
Uno de estos municipios es Guntín, donde en aras de estabilizar las arcas municipales la administración local ha incrementado el IBI a sus convecinos en cada periodo impositivo durante los últimos años.
Guntín, con una extensión de 156 Km2 organizados en 32 parroquias rurales, se sitúa en la provincia de Lugo, de cuya capital le separan 19 km. La ponencia de valores fue publicada en el año 1988, y ha venido actualizándose anualmente con coeficientes de 1.02 de media, hecho que incrementa los valores catastrales de los inmuebles. Sobre este valor se aplica el tipo impositivo que fija el ayuntamiento.
En este entorno rural, con escaso control urbanístico se han mantenido en mínimos los valores de los inmuebles construidos, hasta que para paliar los efectos de la crisis en el saldo presupuestario de las administraciones públicas, el 30 de diciembre de 2011, con la publicación del RD-Ley 20/2011, de medidas urgentes en materia presupuestaria, tributaria y financiera, el Estado permite a las administraciones locales aumentar el tipo impositivo para los ejercicios 2012 y 2013 en función del año de aprobación de la ponencia. En el caso de Guntín se incrementa en un 10% el tipo impositivo aplicado sobre el valor catastral. Este incremento se mantendrá durante los periodos impositivos 2014 y 2015 en virtud de la Ley 16/2013, del 29 de octubre, por la que se establecen determinadas medidas en materia de fiscalidad medioambiental y se adoptan otras medidas tributarias y financieras.
Coincidiendo con el incremento autorizado por el Estado (del 10%), se publica una ponencia parcial en agosto de 2014 año que se acompaña de una actualización por coeficientes de 1,11.
Durante el periodo impositivo 2015, la Gerencia territorial de catastro en Lugo decide iniciar diversos procedimientos de rectificación de la descripción catastral de los inmuebles, dando comunicación de ello a los interesados de una manera sucinta y poco aclaratoria. Estos procedimientos dan como resultado, en general, un aumento de los valores catastrales y la obligación de pago de la diferencia con intereses en el impuesto del IBI para los 4 años anteriores.
A este aumento del valor catastral propuesto por la gerencia se le suma una actualización por coeficientes de 1,11 para el ejercicio 2016.
Si los vecinos de Guntín creían que estaban en paz con catastro, se equivocaban, y antes de ser resueltas las alegaciones presentadas a las propuestas de alteración del 2015, ya se había iniciado por petición de la administración local, un procedimiento de Regularización catastral que pugna por sacar a la luz cuanto alpendre o cobertizo de aperos de labranza se intuya desde Goolzoom y que tendrá efectos desde el 1 de Enero de 2017.
De este modo, muchos inmuebles de Guntín, generalmente viviendas rurales surgidas de la adición de añadidos con baja calidad constructiva, han triplicado su valor catastral. Pocos propietarios de estos inmuebles presentan alegaciones a las alteraciones (a pesar de que existen errores) propuestas por la gerencia, ya sea por desconocimiento de sus derechos o de los ptrámites que deben seguir para hacerlo.
Es de vital importancia que se den a conocer entre los ciudadanos los derechos y obligaciones ante catastro y que se revisen las valoraciones con el fin de comprobar que son correctas y ajustadas a la realidad.